Además, de 2000 a 2010 documentó 82 quejas en agravio a trabajadores de la comunicación, principalmente por violación al derecho a la libertad de expresión y al derecho a la integridad y seguridad personal.
Al respecto, el presidente de la Coddehum, Juan Alarcón Hernández, planteó la necesidad de que autoridades de los tres niveles de gobierno garanticen la seguridad de quienes ejercen la labor informativa, a fin de que los periodistas puedan realizar sus actividades sin tener que pagar un alto costo.
En tanto, el director del centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, aseguró que el derecho a la libertad de expresión siempre ha sido un tema incómodo para quien detenta el poder, y en el caso de Guerrero, agregó, ningún gobernador ha respetado este derecho fundamental.
Las declaraciones de Alarcón y Barrera se dieron durante la proyección del video sobre el informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre la libertad de expresión en México.
De acuerdo con los relatores de ambos organismos, Catalina Botero y Frank La Rue, México se mantiene como el país más peligroso de América para ejercer el periodismo, y quinto a escala mundial.
Y es que de 2000 a 2010, 70 periodistas fueron asesinados a nivel nacional, y en lo que va de este año se han contabilizado 13 crímenes, y los estados donde se reportan “agresiones extremas” son Chihuahua, Guerrero y Sinaloa, de acuerdo con el informe.
La Coddehum informó que en 11 años ha documentado 82 quejas en agravio a periodistas en Guerrero, y el 2002 fue el año de mayor incidencia, con 12 quejas, mientras que en 2007 se registraron 10.
Sobre los 11 crímenes contra periodistas, registrados de 2003 a 2010, nueve de ellos fueron victimados durante la administración de Zeferino Torreblanca Galindo, el periodo más aciago en materia de derechos humanos en la entidad, según la Coddehum.
En esa época perdieron la vida Misael Tamayo Hernández, director del diario El despertar de la Costa, asesinado en 2006, mientras que en 2007 fue acribillado Amado Ramírez Dillanes, corresponsal en Acapulco de Televisa, y en 2009 Jean Paul Ibarra Ramírez, reportero gráfico en Iguala, así como Juan Carlos Hernández, director del semanario El Quijote, y Juan Daniel Martínez Gil, conductor de noticias en W Radio de Acapulco.
En 2010 fueron asesinados Evaristo Pacheco Solís, reportero del semanario Visión Informativa; Jorge Ochoa Martínez, director del periódico El Oportuno; Juan Francisco Rodríguez Ríos, corresponsal del periódico El Sol de Acapulco, y María Hernández Galeana, editora de Semanario.
Los otros dos periodistas fueron asesinados durante el periodo de René Juárez Cisneros: Rafael Villafuerte Aguilar, director del periódico La Razón, en 2003, y Leodegario Aguilera Lucas, director de la revista Mundo Político, en 2004.
Fuente:Proceso
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